
13 dic 2024
Este 13 de diciembre, los vecinos del bulevar Santa Catarina en Pachuca decidieron manifestarse, y como era de esperarse, el Gobierno del Estado respondió con toda la amabilidad que caracteriza a las autoridades: mesas de diálogo, invitaciones al “diálogo” y una gran dosis de paciencia. Porque, claro, ¿qué mejor solución que reunir a todos en una mesa cuando las redes sociales ya estaban haciendo el trabajo de convocatoria?
Para hacer más épica esta historia, resulta que el gobierno, a través de la Secretaría de Gobierno (Segobh), ya había tenido “contacto directo” con los vecinos desde el 25 de noviembre. En aquella mítica reunión, donde por supuesto todos fueron escuchados por figuras clave como el secretario de Gobierno, Guillermo Olivares Reyna, y el secretario de Seguridad Pública, Salvador Cruz Neri. Nada menos que un ejército de funcionarios para resolver los problemas del vecindario.
El tema central de los debates fue la construcción de un Albergue para Niñas, Niños y Adolescentes en situación de movilidad, con la esperanza de que los vecinos no confundieran albergues con centros de migrantes adultos. "¡No se preocupen! Es para menores de edad", se les explicó, a pesar de que algunos rumores en redes sociales sugerían lo contrario. Además, se les ofreció la promesa de obras para beneficiar la zona, pero claro, esos mismos vecinos las rechazaron con entusiasmo. ¿Quién no querría nuevas obras, verdad?
En los días previos a la manifestación de este 13 de diciembre, la Segobh intentó una vez más llegar a un acuerdo. Pero los vecinos, firmes en su postura, rechazaron la invitación al diálogo. Parece que las mesas de trabajo no eran tan atractivas como esperaban.
Antes de que la manifestación tomara forma, el personal de la Dirección General de Gobernación Pachuca hizo presencia para invitar nuevamente a los vecinos a conversar pacíficamente. Lamentablemente, el diálogo no fue aceptado. Los manifestantes, en su afán de resolver sus problemas, bloquearon el bulevar, afectando incluso el acceso al hospital de la Cruz Roja. Porque, claro, ¿qué mejor lugar para expresar el descontento que justo al lado de un hospital de urgencias?
El gobierno, en su afán de mantener la paz y el orden, pidió amablemente que no se afectara a terceros, en especial a aquellos que se dirigían al hospital en busca de atención médica urgente. En resumen, el gobierno asegura que sigue "abierto al diálogo" y a las reuniones, siempre con el ánimo de construir soluciones para todos. Porque, como bien sabemos, ¡todos somos ciudadanos con derecho a ser escuchados... si es que llegamos a aceptar la invitación para dialogar!