14 nov 2024
En un paso más para que la presa Endhó y su zona de influencia dejen de ser el chiste malo de la ecología en Hidalgo, Mónica Mixtega Trejo, la mandamás de Semarnath, se sentó con Marina Robles García, la jefa de Política Ambiental de Semarnat, para planear la gran operación de rescate ecológico. El objetivo: convertir esta deuda histórica en justicia socioambiental de la buena. Porque, francamente, ya era hora de pasar del "bla, bla, bla" al "¡manos a la obra!".
La estrategia no es cualquier cosa. El plan abarca municipios como Atitalaquia, Atotonilco de Tula, Tlaxcoapan y otros más, porque limpiar una sola zona sería como barrer solo debajo de la alfombra. Con este acuerdo, se busca establecer mecanismos de coordinación que no se queden solo en las palabras bonitas y los discursos reciclados.
El compromiso del gober Julio Menchaca —a quien Mixtega calificó de aliado ambiental— también quedó claro: colaborar con todos los sectores para que esta "deuda histórica" no solo sirva para inflar boletines, sino que le cambie la cara a la región.
La reunión con el gobierno federal promete marcar un punto de inflexión en la cruzada por salvar esta zona y hacer de la restauración ecológica algo real, no un cuento de hadas verde. Si todo sale bien, las promesas de colaboración efectiva y resultados concretos podrían hacer que los días de la presa como "el depósito olvidado" queden en el pasado. Mientras tanto, las expectativas están por las nubes… o mejor dicho, por las aguas de la presa.
