
26 nov 2024
¡Agarra tu sombrero, Huautla! El Gober Julio Menchaca no solo vino a decir “hola”, sino a desatar una lluvia de recursos que ni la tierra huautleca podría haber soñado. Con un cheque por más de 105 millones de pesos, Menchaca dejó claro que en esta administración las obras no son un mito, sino una realidad. Desde la rehabilitación de puentes hasta la pavimentación de caminos, el gober se puso a supervisar que todo lo que se haga con el dinero del pueblo esté más claro que el agua (y que no se lo traguen los fantasmas de la corrupción).
Y como si fuera poco, el gober no solo vino a ponerle cemento y asfalto a las carreteras, sino que también se armó de paquetes de apoyo social que llegaron en forma de más de 450 ayudas directas para familias, mujeres solteras y hasta apicultores. ¡Nada de quedarse atrás en los programas! Equipamiento agrícola, pecuario, y hasta para reconversión productiva – todo para darle un buen empujón a la economía local.
Pero ojo, que aquí no se trata solo de repartir billetes. El gober y su equipo, con la Secretaría de Contraloría al frente, aseguraron que cada peso gastado será vigilado con lupa. “El dinero es del pueblo, y el pueblo merece saber en qué se gasta”, dejó claro Menchaca, que ni de broma deja que lo acusen de despilfarrar la lana.
¿Y qué tal el resto de los secretarios? El alcalde de Huautla, Jorge Alberto Hernández Cortés, ya andaba contento porque esta estrategia de "acercamiento" promete cambiar la cara de su querido municipio. Y no es para menos, con más de 4 millones de pesos en equipamiento para la salud, ¡se prevé que hasta el dengue se muera de envidia!
Por si fuera poco, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo mandó a su brazo derecho, Alejandro Sánchez García, para anunciar que, por fin, el programa “Bachetón” va a rehabilitar la carretera federal Pachuca-Huejutla. ¡Una verdadera fiesta de obras que va a dejar a todos hablando por mucho tiempo!
Así que ya sabes, Huautla: Julio Menchaca vino, vio y dejó el pueblo más pavimentado y lleno de recursos que nunca. Ahora solo falta que los nuevos caminos no se los lleve el primer aguacero, pero por lo pronto, con la promesa de transparencia, todos podemos estar tranquilos… hasta el próximo informe.